Tus fotos no deberían salir planas. Aquí empieza la diferencia entre una toma buena… y una que exige atención.
Haz que tus retratos transmitan emoción real. No edites por editar, crea imágenes que hablen por ti.
Corrige sin destruir. Moldea como un artista, no como un principiante. El buen licuado no se nota, se siente.
La diferencia entre una edición amateur y una editorial está en cómo tratas la piel. Tus modelos lo van a notar.
Tus fotos ya eran buenas. Ahora lo serán inolvidables. Este es el tipo de edición que te separa del montón
Te enseña lo que otros ocultan
Va directo al grano: sin teoría innecesaria
Puedes aplicar lo aprendido desde la primera clase
Acceso de por vida, actualizaciones incluidas